“EL HILO POR LO MÁS DELGADO”

Columna de

Héctor Manuel Pérez Cuéllar 

“EL HILO POR LO MÁS DELGADO”.

 

Siempre que suceden homicidios de policías, los muertos son mudos testigos de la incompetencia de cómo se efectúan los operativos sin planeación ni coordinación de acciones.

 

Aquí las preguntas, ¿Acaso no el Ejército y la Guardia Nacional son ahora Proximidad Social?, ¿A qué le llaman Proximidad Social?, ¿Qué sucedió en la Junta Auxiliar del “Paredón” en Chignahuapan, Puebla que la Guardia Nacional y el Ejército llegaron horas después?, ¿No hay Coordinación?, son preguntas que en la imaginaria y en la mente debemos registrar, porqué en nuestra realidad eso de hacerse cargo de la Seguridad el Ejército y señalo “En las calles”, no se ve por ningún lado junto con la Guardia Nacional.

 

Hay que empezar por decir que el Gobernador del Estado menciona que “No hay descomposición Social”, entonces a fin de tener consideración y que no se moleste pero sobre todo no le sean incomodas las preguntas, habría que decirle ¿Qué entiende por Gobernabilidad de un Estado cuando un grupo de Delincuentes asesinan a dos elementos policiales y después del hecho retienen a otros más?, además de que poblaciones enteras se erijan como defensores de un delito tan marcado como lo es el robo de combustible llamado “Huachicol”, ¿acaso ya no recuerda el incidente de Palmarito?, en fin para que dar más detalles, el verdadero desglose debe situarse en ¿Por qué no se controla y se tiene una visión de Prevención en este delito de alto impacto? .

 

El robo de combustible tiende a ser el centro y el foco que contamina a la Sociedad Poblana desde el 2012, la extracción clandestina de los ductos provoca la escalada de los demás delitos, valga la expresión se convierten en acciones conexas que generan pánico y terror en la Sociedad, las Corporaciones Policiales, si como lo vimos en Chignahuapan, solo intervienen las Municipales o Estatales, nunca se logrará erradicar el mal, amén que el delito es de competencia de la Federación y que como lo vimos brillo por su ausencia en la representación del Ejército y Guardia Nacional.

 

Es muy interesante saber que la tasa de policías por cada 1,000 habitantes es del .6%, en ese sentido nos encontramos que menos de un policía cuida a 1,000 personas, ahí empieza el problema real, existe también falta de personal que podría agregar que el reclutamiento y aceptación es tortuoso y con una serie de candados que acaban por desmotivar el ingreso de elementos, luego los procesos de preparación aunque no son los ideales pueden llegar a ser de 3 a 6 meses, generando siempre falta de personal, los reclutamientos los realizan en el centro del Estado y cuando ya salen los empiezan a mandar alejados de su familia, con lo que el efecto de rotación de personal se presenta constantemente.

 

Puebla se coloca en las primeras 10 entidades en donde su personal que fallece dentro de su jornada laboral, fue por civiles armados, colocándose en el 10° lugar, entonces con ello nos muestra una constante de que las Coordinaciones de las Corporaciones es ineficiente, el Estado ejerce un presupuesto en cifras redondas cerca de los 3,430.6 mil millones de pesos, con crecimiento del 13 al 14% anualmente, entonces las cifras no son nada mal para generar mejores acciones de Seguridad, tanto de los ciudadanos y de los propios elementos policiales, en los 217 municipios que conforman el Estado de Puebla, solo existen 79 comandancias Estatales de acuerdo al INEGI, entonces de simple lógica que lo acontecido en Chignahuapan es producto también de falta de mayor presencia en determinadas regiones.

 

Al contar nuestro Estado con solo dos Academias para la formación de elementos es otro de los factores que inciden para la deficiente forma de atender el principal mal que afecta a la Sociedad Poblana, miren de los elementos egresados contra los desertados no está mal, 569 ingresaron 561 egresaron y solo 8 desertaron, buen termómetro, pero habría que analizar si no se recluta más acaso es por falta de presupuesto, por no ser del interés de los ciudadanos o en su defecto no se realiza con entusiasmo.

 

En el tema que impacta mucho a los ciudadanos es la presencia de armas de fuego, de acuerdo al INEGI en sus cifras en Puebla solo se aseguraron 13 armas, pareciera patética la cifra pues en cualquiera de los delitos como el robo en el transporte público aparece un arma de fuego, que contrasentido se percibe, algo que muchas de las veces se consideran actos de molestia como son las revisiones, se realizaron 1986 todas casualmente a personas al menos así lo dice el reporte y en todas se habla con puesta a disposición ante el Ministerio Público, pero el caso de vehículos dice no aplica, que raro.

 

Hay una forma alternativa de apoyo a la Seguridad Pública como lo es las empresas de Seguridad Privada aquí se cuentan con 216, las cuales deben por Ley ser auxiliares en términos de la Seguridad Pública y que los Mandos Policiales los utilicen con esa visión de prevención del Delito, desgraciadamente no es el caso, así que para concluir hay cifras, hay acciones, pero desde mi óptica están siendo empleadas sin visión de una Seguridad Integral basada en objetivos precisos, donde el centro de todo sean los ciudadanos.

 

            “Fiarse de todo el mundo y no fiarse de nadie son dos vicios. Pero en el uno se encuentra más virtud, y en el otro, más Seguridad”. (Lucio Anneo Séneca)

 

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